domingo, 30 de noviembre de 2014

Comportamiento de los medios en la Venezuela democrática

La coalición conformada por Acción Democrática, COPEI y Unión Republicana Democrática, consolidada en el Pacto de Punto Fijo contuvo a la vanguardia organizada desde la clandestinidad y al movimiento popular que logró el derrocamiento de la dictadura de Marcos Pérez Jiménez. Tras este pacto comenzó la Venezuela democrática. La libertad de prensa fue la primera en ser suspendida antes de la Venezuela democrática, pero luego la primera en ser restaurada en el gobierno del Almirante Wolfgang Larrazábal en 1958, donde fue posible informar y opinar libremente.  Esta situación se fue truncando con el idealismo de defender la democracia emergente, y en el proceso de salvaguardar estos ideales, se inician escenarios de represión en contra de quien piense o se exprese con tendencias de partidos de izquierda. Con el  afán de desarrollar nuestro proyecto el cual posee como uno de los objetivos la  concientización  de los usuarios de Twitter en Venezuela se ha decidido el utilizar las Tecnología, Información y Comunicación apoyándonos de la hipertextualidad para invitar a los usuarios comparar los procesos que han enmarcado a los medios de comunicación en masas durante los gobiernos comprendidos entre 1958 hasta 1998, realizando un paralelismo hasta la actualidad y permita disolver la ideología opositora de que no hay libertad de expresión. Mediante la bitácora digital se buscará ilustrar nuestra historia venezolana  como  a su vez el comportamiento de los medios de comunicación en masa durante este periodo, el cual permitirá la interacción de usuarios, donde expresaran de manera inmediata y espontánea inquietudes, interrogantes, sugerencias, aportes y recopilación de ideas y conocimientos, con el fin de crear un nuevo modelo educativo de información para los individuos.

1958- 1998 Períodos Presidenciales


1959- 1964 Rómulo Betancourt
1964- 1969 Raúl Leoni
1969- 1974 Rafael Caldera
1984- 1989 Jaime Lusinchi

Fuentes Bibliográficas
FUNDACIÓN POLAR, EL NACIONAL (s.f.). Historia de Venezuela en Imágenes (Fascículos varios)

Cadena Capriles (s.f.). CUADERNOS Historia de Venezuela (Fascículos varios)

EL 23 DE ENERO DE 1958
Manuel Caballero
Historia para Todos, CONAC
Caracas 1995

HISTORIA CONSTITUCIONAL DE VENEZUELA
José Gil Fortoul
Biblioteca Simón Bolívar
Editorial Cumbre
México 1976

HISTORIA FUNDAMENTAL DE VENEZUELA
José Luis Salcedo Bastardo
Ediciones de la Biblioteca Central, UCV
Caracas 1979

HISTORIA DE VENEZUELA
José Manuel Siso Martínez
Caracas 1981

HISTORIA DE VENEZUELA
Guillermo Morón
Británnica
Caracas 1971

BREVE HISTORIA DE VENEZUELA
Antonio Arellano Moreno
Caracas 1974

VENEZUELA CONTEMPORÁNEA, 1974-1989
Pedro Cunill Grau y ortos
Fundación Eugenio Mendoza
Caracas 1989

HISTORIA ELECTORAL DE VENEZUELA
Jesús Sanoja Hernández
Colección Ares, Los Libros de El Nacional
Caracas 1998

DICCIONARIO DE HISTORIA DE VENEZUELA
dirigido por Manuel Rodríguez Campos
Fundación Polar
Caracas, 1997

DE PEREZ JIMENEZ A HUGO CHAVEZ CENSURA Y AUTOCENSURA
José Agustín Catalá y Eleazar Díaz Rangel
Catalá, El Centauro
Caracas 2003

PÉREZ, Johanna (s.f.). Comunicación Alternativa en Venezuela: cambios y continuidades [en línea] Recuperado de http://saber.ucv.ve/xmlui/bitstream/123456789/4465/1/PONENCIA%20CONGRESO%20ONCTI%20PEII%20Comunicaci%C3%B3n%20Alternativa%20en%20Venezuela.pdf

URRIBARRÍ, Raisa (3 de febrero 2011). La comunicación alternativa se desliza a la red [en línea] Recuperado de http://www.codigovenezuela.com/2011/02/opinion/raisa-urribarri/la-comunicacion-alternativa-se-desliza-a-la-red

MACHADO, Carlos (s.f.). Reflexiones para un debate necesario sobre comunicación alternativa en Venezuela [en línea] Recuperado de https://ecopopularve.wordpress.com/2014/01/16/opinion-reflexiones-para-un-debate-necesario-sobre-comunicacion-alternativa-en-venezuela/


Preámbulo: Marcos Pérez Jiménez: Enero de 1958 – La Caída del Régimen



    El 19 de abril la Asamblea designó a Marcos Pérez Jiménez, presidente “constitucional” de la República, para el período 1953-1958.

La libertad de expresión estaba segada debido a que las publicaciones políticas quedaron prohibida, y unas juntas de censura controlaban la prensa, ordenando cierres temporales por cualquier desacierto, y generando una prudente autocensura.

Pero al mismo tiempo surgía una prensa de circulación clandestina, leída con mucha atención. La censura actuó incluso contra algunas comedias teatrales y radio-novelas.

Mientras que para la educación era evidente el interés del gobierno en esta materia ya que casi la mitad de la población en edad escolar había dejado de matricularse en los planteles oficiales, la formación de docentes disminuyó; lo que causaba menos conocimientos, menos críticas. Reemplazando esta insuficiencia, se desarrolló la educación privada.

El apoyo norteamericano, factor externo, se mantuvo intacto hasta enero de 1958 en donde se va forjando la caída del régimen, ya que los factores internos de poder que respaldaron a Marcos Pérez Jiménez desde el 24 de noviembre de 1948 tales como la iglesia, la burguesía y las fuerzas armadas se fueron pronunciando en su contra.
Para el 21 de enero de 1958 La Junta Patriótica planteó la necesidad de llamar a huelga general para demostrar el repudio de la sociedad contra la dictadura.

Los principales periódicos eran entonces El Nacional, El Universal, Últimas Noticias, La Esfera, La Religión, Panorama de Maracaibo, El Carabobeño de Valencia, y el pequeño periódico de la colonia italiana, La Voce d’ Italia. Desde el inicio de la crisis política, algunos periódicos ya habían intentado acciones de protesta; varios trabajadores gráficos, periodistas, articulistas, directores y hasta dueños de periódicos estaban detenidos desde hace varios días.

La Asociación Venezolana de Periodistas y la Federación de Trabajadores Gráficos se activaron en la preparación del paro. Por lo que en la noche del 20 de enero, los periódicos ya se estaban sumando al paro.

Es así como el 21 de enero de 1958, Caracas y las ciudades del interior amanecieron sin periódicos por lo que la población sintió que, al final “iba a pasar algo”.

Durante la mañana, pese al despliegue policial en las calles, la juventud de los partidos políticos siguió realizando llamados a huelga, los militantes merodeaban por los alrededores de las plazas principales, para concurrir y concentrarse en ellas al iniciarse la huelga.

         Por lo que durante el día la gente salió a la calle y desde los balcones se empezó a gritar “¡Abajo la dictadura! ¡Muera Pérez Jiménez!”. Los militantes recorrían las avenidas de Caracas para mantener un clima de agitación, entre protestas en distintos sitios de la ciudad, como El Silencio, la plaza La Concordia, Catia, entre otros. De manera que los puestos de asistencia se declararon en emergencia al final de la jornada, de donde se contabilizaban 58 muertos y 254 heridos.

         A las 4 de la tarde, al constatar que la situación estaba desbordándose, el gobierno decretó el toque de queda en la capital.

         Pérez Jiménez por su parte durante este día se encontraba en su despacho, recibiendo información de lo que iba aconteciendo, tratando de controlar la situación que se daba en las calles y los movimientos alarmantes en el seno de las fuerzas armadas.

         Para el 22 de enero la jornada cívica se había extendido, ya para la noche habían unos 300 detenidos en los sótanos de la Seguridad Nacional.

         La caída del régimen era inminente, la conspiración militar se extendía a los cuarteles. Varios oficiales de la Marina, entre ellos el capitán de navío José Vicente Azopardo, estaban en contacto con la Junta Patriótica.

         Desde su despacho, Pérez Jiménez empezó a comunicarse con los más altos oficiales, instándolos a mantenerse leales. La mayoría se rehusó abiertamente, empezando por el comandante en jefe de la Marina, el contralmirante Wolfgang Larrazábal, quien lideraba el movimiento más activo, el de la Armada. No obstante, aún había algunos oficiales que planteaban la necesidad de someter el movimiento por las armas. Pérez Jiménez se negó, dándose cuenta de que el gobierno ya estaba caído.


         A las 3 de la madrugada del 23 de enero, ya habiéndose despedido de los miembros de su gabinete, Pérez Jiménez se dirige con su familia y allegados al aeropuerto de La Carlota, huyendo hacia Santo Domingo en el avión presidencial bautizado La Vaca Sagrada.

Gobierno de Wolfgang Larrazábal: Enero de 1958 – Febrero de 1959

         
          El 23 de enero de 1958, en espacio de la madrugada La Junta Patriótica anuncia por radio la huida de Pérez Jiménez y convocó a los ciudadanos a salir de sus casas para expresar su alegría. Lo que derivó que una multitud eufórica se dirigiera hacia El Silencio, y luego hacia el palacio de Miraflores.

         Otros grupos se desplazaron hacia El Guarataro, donde estaba la cárcel del Obispo, y hacia la plaza Morelos, donde estaba la Seguridad Nacional, la cual fue asediada durante varias horas; por lo que el ejército tuvo que intervenir para proteger a los funcionarios, de igual manera la gente logró liberar a los detenidos.

         A su vez se registró una aglomeración vengativa que asaltó la sede del periódico oficial, El Heraldo, y destruyó sus equipos.

         Mientras el pueblo ocupada las calles, los oficiales más comprometidos estaban reunidos en la Escuela Militar con la alta jerarquía de las fuerzas armadas, para llegar a un acuerdo acerca de quienes debían asumir el mando. Por su parte, banqueros, empresarios, industriales, grandes comerciantes y algunos dirigentes políticos acudían al palacio de Miraflores donde, al rato, habiéndose ya puesto de acuerdo, llegaron los oficiales que dirigieron el movimiento.

         Wolfgang Larrazábal nació en Carúpano en 1911, inició su carrera en la Marina cuando entró a la Escuela Naval a los 17 años de edad, llegando a desempeñar importantes cargos a partir de 1947, cuando fue nombrado comandante de las Fuerzas Navales, luego, fue agregado naval de la embajada de Venezuela en Washington; y en 1958, era comandante de la Marina cuando se alzó contra el régimen perezjimenista. Su crédito en las fuerzas armadas y sus principios civilistas le valieron ser designado presidente de la Junta de Gobierno, el 23 de enero de 1958. El pueblo lo llamaba “Worfan”, su gracia era indiscutible, agraciado por su estampa de galán y sus dotes musicales.

Si la libertad de prensa fue la inicial víctima del gobierno que reemplazó al del presidente Rómulo Gallegos, incluso al ser suspendidas las garantías constitucionales, el 23 de enero de 1958 fue la principal en ser rescatada entre todas las libertades retenidas en ese período. Desde la madrugada, las emisoras comenzaron a difundir informaciones y opiniones con toda libertad, y al mediodía aparecieron las primeras ediciones extras de casi todos los diarios de Caracas.

Inició así un breve período, presidido casi todo por el almirante Wolfgang Larrazábal, donde fue posible informar e igualmente opinar libremente. Aun así no era tan absoluta esa libertad, ya que no había condiciones para que la usaran los defensores de la dictadura derrocada.

Durante ese primer año luego de recuperadas las libertades públicas, periodistas y medios se cuidaron de no difundir noticias que en algún momento pudieran poner en peligro el régimen democrático recién nacido, quebrantable por la falta o debilidad de organizaciones (partidos, sindicatos, etc.), que pudieran asumir su defensa.

Más allá de esas limitaciones fue posible ejercer la libertad de prensa en plenitud.


         Tras ser derrotado Wolfgang en las elecciones del 7 de diciembre de 1958, persistiría en hacer vida política durante la década del 60, llegando a ser embajador de Venezuela en Chile y presentando su candidatura presidencial en 1963, alcanzando posteriormente a ser elegido diputado varias veces.

Gobierno de Rómulo Betancourt: 1959 - 1964




Indudablemente la situación de la prensa no se hubiera visto afectada si el ámbito político del país no hubiese tenido cambios importantes. Durante el gobierno de Betancourt existieron varios alzamientos militares, todos fallidos, y un movimiento insurreccional de fuerzas de izquierda, que influidas por la Revolución Cubana entendieron llegado el momento para intentar una revolución parecida. Durante años se mantuvieron grupos guerrilleros en las ciudades y en el campo con el propósito de derrocar al mandatario. Como respuesta, el gobierno ilegalizó partidos políticos y ejecutó represión en la prensa portavoz de esas fuerzas, o en aquella que coincidiera en la oposición. En momentos, lo que se ha denominado “gran prensa” que en su mayoría estuvo al lado de esa política oficial de defensa del sistema democrático también estuvo afectada.

Pero antes de que se desarrollaran estas acciones antigubernamentales, el diario La Razón, que dirigía Marco Aurelio Rodríguez, propiedad de Alfredo Abilahoud, y que circulaba desde el 8 de enero de 1959, fue presionado por su línea editorial oposicionista. Las cuales se denunciaron en un editorial “Le molesta al gobierno que exista en Venezuela un periódico independiente que informa lo que cree verdad”. Rodríguez y Abilahoud fueron detenidos y expulsados. El diario pasó a manos de partido URD, dirigido por José Vicente Rangel y a los pocos meses cerró. Sin haber ningún tipo de reclamo ni de parte de la AVP ni del Bloque de Prensa.

Represión a la Prensa Popular

Existió represión de la que fue objeto lo que para la época se conocía como prensa popular de izquierda, de donde se puede obtener los siguientes hechos:

11 de Julio 1960: decomisada la edición de Izquierda.
Octubre 1960: asalto a los talleres de El Independiente, donde se imprimían el diario Tribuna Popular y otros periódicos.
28 de Noviembre 1960: suspensión indefinida de Tribuna Popular, Izquierda y otros semanarios.
17 y 28 de Noviembre 1961: suspensiones del diario Clarín.
14 de Diciembre 1961: suspendido el nuevo diario La Hora.
22 de Enero 1962: suspendidos Clarín y La Hora.
Marzo 1962: circula sólo durante 3 días el nuevo diario Crítica.
5 de Mayo 1962: asaltados talleres y redacciones de Clarín y La Hora.
7 de Mayo 1962: clausurado definitivamente Tribuna Popular.
25 de Mayo 1962: suspendido Clarín por 15 días.
5 de Julio 1962: se realiza un decreto por parte del Ministerio de Relaciones Interiores: “Se ordena que todas las publicaciones del país, sea cual fuere su naturaleza, se abstengan de dar informaciones relacionadas con el orden público… sin consultar previamente con los funcionarios designados al efecto por este Despacho, o por las respectivas gobernaciones de estado, según el caso.”
1963: suspendidos temporalmente, en momentos distintos, los diarios El Imparcial, de Maracay; El Tiempo, de Valera, y El Día, de Acarigua.
Septiembre 1963: acoso permanente a Clarín, y clausurado el diario El Venezolano.

Adyacente a estos hechos, se instauró un régimen de censura que se aplicó en los extensos períodos de suspensión de las garantías constitucionales. En la oportunidad de su presentación (junio 1962) a la Comisión de Política Interior de la Cámara de Diputados, que presidía José Vicente Rangel, el jefe de Redacción de El Nacional, Jose Moradell, declaró: “Existe una situación de censura. El régimen de censura no excluye el material publicitario, el material de propaganda, abarca por igual ese tipo de material y el material de redacción. Por consiguiente, ese régimen de censura causa también, perjuicios en el ejercicio financiero de periódico.”

El informe indica:

“A una pregunta sobre la presencia de censores oficiales en el periódico, Lamache (jefe de información de El Nacional en 1962) expresa que todas las noches se presentan dos personas autorizadas por el Ministerio del Interior a las oficinas de redacción para revisar el material.”

A su vez la Cámara de Diputados aprobó el 6 de julio:

“Declaras que la libertad de prensa en Venezuela atraviesa en los actuales momentos por una de sus más graves y difíciles etapas, debido a la supresión sistemática de diversos órganos periodísticos y a la persecución de profesionales de la prensa, así como al régimen de censura vigente”. Y condenó esas prácticas del Ejecutivo Nacional.

Pocos diarios no publicaron esa noticia, y el Bloque de Prensa no emitió ninguna declaración. Se presume que especularon que hacerlo podría debilitar al gobierno que defendía todo el sistema y a la vez resistía el alzamiento de izquierda.

Eventualmente, el Presidente Betancourt se le vinculo reuniones con directores y editores para informarles sobre la situación política y económica, y pedirles cooperación.

Jesús Sanoja Hernández, en entrevista donde hace un repaso del periodismo venezolano, publicada en la revista Respuesta N° 55-56, 1980, dice: “Pero la década del sesenta redefine los campos de la polémica e ideología, y yo no podría decir, sin contrariar mi voluntad histórica, que la Cadena Capriles (…) haya contribuido a la democracia representativa, no obstante aparecer como una de sus fórmulas de expresión. Porque su campaña fue netamente antidemocrática durante algunos años, y no por ser anticomunistas sino por haber exaltado los contravalores más negativos que se manejaban en la sociedad venezolana y que constituyen, digamos, una rotunda negación de los principios éticos periodísticos”.


En este primer gobierno electo en la nueva etapa democrática, surgieron por lo menos 19 diarios, la mayoría con disposición política opositora: La Razón, Clarín, La Hora, El Venezolano, La Extra, La Tarde, y uno progubernamental, La Nación. Reflejo de la lucha política e ideológica de esos años, lucha que también se expresaba en semanarios y revistas, de los cuales los de mayor circulación fueron Tribuna Popular e Izquierda. Pero sólo perduraron otros dos diarios, ambos del interior, fundados en 1962; El Imparcial en Maracay y El Anaquense, en Anzoátegui, y por menos tiempo, el oficioso La República.

Gobierno del Dr. Raúl Leoni: 1964 – 1969



Nace en El Manteco, Estado Bolívar, Venezuela, el 26 de abril de 1905 y muere en Nueva York, Estados Unidos, el 5 de Julio de 1972.

Destaca por ser parte de la llamada "Generación del 28", y además fue uno de los fundadores del partido político Acción Democrática, y presidente de la República en el período 1964 - 1969.

Inició sus estudios en Upata y su bachillerato entre Ciudad Bolívar y Caracas. Fue dirigente estudiantil y presidente del Centro de Estudiantes de Derecho al cursar estudios en la Universidad Central de Venezuela, y director de la revista Centro.

Entre  1963 y 1973 el país experimenta significativas, opuestas y consoladoras evoluciones en el área política, cultural, económico y social. Referente a la política, se fortalece la experiencia democrática instruida en 1958. En la cultura, se produce un momento de aparición creativa en el campo de las artes y de intensos cambios en las costumbres cotidianas. En lo económico y social, se aumenta el movimiento social interno, se extienden las clases medias,  se da inicio a planes de desarrollo y de vivienda que crean un enfoque esperanzador del futuro nacional.

Raúl Leoni y Rafael Caldera ocupan la presidencia de la República en los períodos constitucionales 1964/1969 y 1969/1974. Leoni como el primero en acoger el poder de manos de un presidente constitucional, y el primero en concedérselo a un candidato de la oposición.

Durante el período de Leoni se prolongan las guerrillas, que decrecen al final, cuando el PCV (en 1965), proclama la tesis de “paz democrática”. Rafael Caldera anunciaba la pasificación. En la década surgen nuevos partidos político, entre ellos el Movimiento Electoral del Pueblo (MEP), producto de una nueva división de AD y el Movimiento al Socialismo (MAS) y la Causa R, de una división del Partido Comunista.

Raúl Leoni, Presidente

      Raúl Leoni toma posesión de la presidencia el 11 de marzo de 1964, con la proposición de un gobierno “de equilibrio y de amplitud”. Leoni le pone fin al “Pacto de Punto Fijo”, porque decía que le quitaba “coherencia organicidad al régimen”, e intenta otro diseño.

      Designa solo tres militantes de Acción Democrática para el gabinete: Gonzalo Barrios (Relaciones Interiores),  Leopoldo Sucre Figarella (Obras Públicas) y José Manuel Siso Martínez ( Educación)

Los demás son independientes: Ignacio Iribarren Borges,  Manuel R. Engaña, Alfredo Arreaza Guzmán, Alejandro Osorio, Eloy Lares Martínez, Lorenzo, Azpúrua Marturet, Miguel Ángel Burelli Rivas y Manuel Pérez Guerrero.

Manuel Mantilla en la Secretaría General de la Presidencia, Raúl Valera en la gobernación de Caracas. En ese mismo momento Leoni postula un gobierno de colaboración, Caldera rechaza esta opinión y condiciona la participación de su partido a la presentación de un programa.

En noviembre de 1964, Leoni inicia negociaciones con Villalba y Uslar Pietri, y construye lo que se conoce como “gobierno de Ancha Base”. Así van al gabinete, por el uslarismo: Ramón Escovar Salom, José Joaquín González Gorrondona y Juan José Palacios. Por URD, Luis Hernández Solís, Domingo Guzmán Lander y Hens Silva Torres. El intento dura 16 meses.  Al retirarse del gobierno, Uslar Pietri le enuncia sus razones al presidente: “…la falta de unidad, de acción eficaz por parte del gobierno como consecuencia de la ausencia de decisiones compartidas y aceptadas por los tres partidos”.

Leoni gobierna sus últimos años con un gabinete de independientes en su mayoría.

Tiempo de grandes proyectos

         Leoni intenta llevar una reforma tributaria y presenta el proyecto en  1966. La alianza de grupos políticos de derecha e izquierda, con abierto arbitraje de las compañías petroleras, la detiene. Promueve decisivamente el desarrollo de Guayana. La industria siderúrgica y la generación hidroeléctrica de Guri.

         La producción petrolera mantenía un promedio diario alto, hasta llegar a 3.600.000 de barriles en 1968. Durante todo el período la unidad monetaria se conserva estable.

         En este gobierno los sindicatos obtienen gran poder. En 1968 entra en ejercicio el Banco de los Trabajadores, que se encontraba destinada a la captación del ahorro popular y a la canalización de recursos hacia las necesidades básicas de la clase obrera. Se origina una reducción sustancial del desempleo. En enero de 1967 entra en vigencia la nueva ley de los Seguros Sociales.

         De toda forma, se incrementan los gastos destinados a financiar programas de educación y servicios sanitario- asistenciales. Son construidos y reconstruidos 3.993 km de carreteras y autopistas y pavimentos y repavimentados 6.330 km. Se interceden importantes sumas destinadas a viviendas y urbanismo, así como a la construcción de acueductos y obras sanitarias. El 6 de enero de 1967 el presidente Leoni funda el puente sobre el Orinoco. Mediante recursos extraordinarios son atendidos los daños ocasionados por el terremoto de 1967. De esa manera, se impulsan programas para el desarrollo de la institución armada, atendiéndose el mejoramiento profesional, la construcción de instalaciones militares y la renovación de equipos y materiales de guerra.

         En política exterior se arrojan las bases de Acuerdo de Cartagena en una reunión cumbre celebrada en Bogotá, con Eduardo Frei, de Chile, Carlos Lleras Restrepo, de Colombia, y representantes de Perú y Ecuador.

Cuatricentenario  y terremoto

La ciudad capital celebra los 400 años de fundación con desfiles, carrozas y la escogencia de la reina de las festividades. Elsy Manzano, la elegida, se convierte en un personaje popular. La ciudad revisa su historia y sucesos. Se crean memorables colecciones de discos y libros. Un ejército de intelectuales y artistas, dirigido por Jacob Borges y Mario Robles, presenta un multiespectáculo Imagen de Caracas, en el que se utilizan técnicas prácticas. Entre las avenidas Bolívar y México, en medio de un escenario combinado por enormes pantallas colocadas en forma circular, el público asiste a una original interpretación de la historia venezolana. La felicidad que acompaña a la celebración se transforma en tragedia el 29 de julio de 1967, cuando un terremoto de graves proporciones destruye algunas zonas de Caracas, afectando en gran cantidad Los Palos Grandes y Altamira. Tienen su epicentro en el mar Caribe, a unos 70 km de las costas. Caraballeda sufre daños de gran gravedad y, a través de la llamada Falla de Humboldt, sus ondas afectaban el Este de la ciudad, dejando un total de 236 muertos, 2.000 heridos y daños materiales valorados en 450 millones de bolívares.

Cultura

En 1965, por decisión oficial se funda el Instituto Nacional de Cultura y Bellas Artes, como primera entidad moderna de gestión de políticas culturales del Estado. En 1967, se implanta el premio Internacional de Novela “Rómulo Gallegos” y, al siguiente año en 1968, el escritor peruano Mario Vargas Llosa, con su obra La casa verde lo gana en su primera edición. Cinco años más tardes, en 1972, el premio le pertenece a Gabriel García Márquez, por su novela Cien años de Soledad. El autor, en gesto sorprendente para la oficialidad de entonces, dona el premio de US$ 25.000 al Movimiento al Socialismo para su campaña electoral.

A principios de 1968, el Instituto Nacional de Cultura y Bellas Artes funda la editorial Monte Ávila, bajo la gerencia de Benito Milla. De igual forma se crea la revista Imagen, que tuvo una publicación masiva que se especializaba en el arte y cultura que quedó a cargo en sus principios por Guillermo Sucre y Esdras Parra. Ese mismo año la escritura hace debut en el boom de la literatura latinoamericana en la novela de Adriano González León, País Portátil, la cual recibió el premio Biblioteca Breve del famoso y prestigiado sello editorial  español Seix Barral.  En 1964 se publican Paisano de Ramón Palomares y Se llamaba SN de José Vicente Abreu; en 1965, Marzo anterior de José Balza; en 1968, La mala vida de Salvador Garmendia y Andén Lejano de Oswaldo Trejo; en 1969, El osario de Dios de Alfredo Armas, y en 1970, Cuando quiero llorar no lloro de Miguel Otero Silva y Rajatabla de Luis Brito García.

Elecciones de 1968

La candidatura presidencial de 1968 cedida la tercera división de AD y la pérdida del poder.  Pero también conmueve a las bases de otros partidos, como URD, en donde Alirio Ugarte Pelayo aparece preparado a reñir contra Jovillo Villalva. En 1966, Prieto Figueroa abandona la presidencia del Senado para ocupar la presidencia de AD, mientras Gonzalo Barrios renuncia al MRI para encargarse de la Secretaría Generales del partido. La división de AD termina en la fundación del Movimiento Electoral del Pueblo y en la candidatura de Prieto Figueroa. AD enunciaba a Gonzalo Barrios.

Barrios y Rafael Caldera combaten por la presidencia de la República en diciembre de 1968 como los candidatos con auténticas elecciones. Los cálculos finales son los más angostos de la era democrática; Caldera consigue 1.082.941 y Barrios 1.051.870 votos. Otros dos candidatos obtienen también votación apreciable, lo cual indicaba la propagación de la opinión pública: Burelli Rivas, 829.379 votos, Prieto Figueroa, 719.733; comprensiblemente, la división entre Barrios y Prieto facilita el triunfo de Caldera, quien gana con el 27% de los votos.

Su eslogan es: “El cambio va”.

Su período de gobierno fue considerado como una etapa de concordia y entendimiento nacional. Aunque también resultó durante el mismo que la represión política fue declarada como excesiva, ensalzando la efectuada en los llamados "teatros de operaciones", en la lucha contra la lucha guerrillera.

Durante el gobierno del Presidente Raúl Leoni, los cambios políticos hechos contribuyeron a la estabilización de la prensa. En la medida en que la sublevación de izquierda disminuyó y casi se dispersa la conspiración militar, la relación gobierno-prensa se hizo más clara y disminuyeron las prohibiciones, casi siempre ocasionadas por la acción sediciosa de la izquierda. Pero, en esa etapa se engendró una reacción contra la Cadena Capriles.

En noviembre de 1964 fue clausurado el diario La Extra, y suspendida la revista Venezuela Gráfica “por inclusión de materiales considerados subversivos”, un reportaje sobre las guerrillas escrito por Teodoro Petkoff desde el Cuartel San Carlos, donde estaba arrestado, firmado por “Ultabiano León”.

Entre los años de 1964 – 1965, la política editorial e informativa del diario La Esfera se comportó abierta oposición al gobierno de Leoni. En diciembre de 1964 se dio la primera reacción del gobierno que consistió  en retirar los avisos oficiales. En los medios venezolanos, estos representaban un significativo porcentaje del volumen de publicidad. El 9 de abril de 1965 fueron allanados los locales de los diarios Últimas Noticias, La Esfera y El Mundo, y apresados el editor Miguel Ángel Capriles y Víctor Simone D’ Lima, director del tabloide, con la excusa de estar conspirando, fueron trasladados a la cárcel de San Juan de los Morros. Ciertos dirigentes oposicionistas también fueron apresados. César Capriles, gerente, denunció el caso ante la SIP y el Bloque de Prensa, y éste informó que “debido a lo delicado del asunto planteado” se convocó a una asamblea el lunes 12 de abril, donde pactó pedir una investigación de los hechos. La SIP emitió una declaración el 12, “lamentando la detención”, pero no reclamó su libertad ni protestó. Después de varios días, Capriles y otros presos políticos fueron puestos en libertad.

Personas vinculadas al partido de Acción Democrática fundaron el vespertino La Hora en 1964, pero dos años después debió cerrar sus puertas. Lo mismo ocurriría el 8 de agosto de 1968 con La República. Inservibles fueron los esfuerzos de sus trabajadores, regulados por el periodista Rafael Villasana, por crear una cooperativa. Sus pérdidas eran de 12 millones de bolívares.

El 5 de abril de 1965, la Editora Metropolitan que presidía Ildemaro Lovera, con un capital de 1.200.000 bolívares, que debió aumentar meses después, sacó a la calle La Verdad. Un año después había perdido todo su capital y en 1967 dejó de circular.

En el interior, la situación fue mejor. De 7 diarios, sólo uno, El Regional de Valencia, desapareció. Los demás consolidan su circulación; El Diario, de Maturín; Crítica, de Maracaibo; La voz de Guarenas, estado Miranda; El Informador, Barquisimeto; La Nación, San Cristóbal, y Provincia, Cumaná.

Ante los rumores sobre la posible venta de La Esfera, sus directivos editorializaron, el 12 de agosto de 1965, “La Esfera no se vende”. A lo que luego tuvo que ser desmentido cuando fue adquirida en 2.400.000 bolívares por un grupo de 24 empresarios encabezados por Alejandro Hernández, Jesús Calvo Lairet, J. J. González Gorrondona, Ángel y Reinaldo Cervini, Juan E. Branger, Emilio Conde Jahn, Eduardo Mendoza G., Concho Quijada y Carlos Beracasa. Tras un año de pérdidas que alcanzaron la suma de 1.700.000 bolívares dejó de circular el 7 de diciembre de 1966.

En este período, la circulación de los diarios aumentó. En 1966, por ejemplo, se estimaba en 671.500 ejemplares diarios, lo que significaba un índice de acuerdo con la UNESCO de 70,8 ejemplares por cada 1.000 habitantes. Cifra que discrepaba visiblemente con el 26,9 de 1946. En cuanto a publicidad comercial en prensa se refiere, los años 65-67, según estadísticas de ESPUM, fueron de 75 millones de bolívares. Iniciaba a disminuir su porcentaje del total de la inversión publicitaria; pues crecía desmesuradamente en televisión, a cada año.

El 11 de marzo de 1969, Leoni le otorga la presidencia  a Caldera. Al tomarla éste por su parte, es autorizado como representante de la generación de los políticos que nace a raíz de la muerte de  Gómez en 1936. Renuncia la teoría de gobiernos de coalición y forma su primer gabinete con militantes de COPEI, con empresarios e independientes.

Hechos resaltantes

1964: El 6 de abril el supe tanquero Esso Maracaibo, con una carga de 268.000 barriles de petróleo crudo, embiste contra dos pilotes de la base del puente sobre el lago de Maracaibo y causa el desprendimiento de 260 metros de la plataforma del puente.

1967: El 6 de febrero  los líderes comunistas Pompeyo Márquez Teodoro Petkoff y Guillermo García Ponce se fugan del cuartel de San Carlos en Caracas, utilizando un túnel construido desde una casa vecina. El 18 de junio es creada la Universidad Simón Bolívar (USB), institución que abre sus puertas el 19 de enero de 1970. El 29 de julio a las 8:05 de la noche, Caracas es sacudida por un terremoto. El sismo que duró 35 segundos, deja más de 200 muertos y cuantiosas pérdidas materiales.


1968: La Corte Suprema de Justicia dicta sentencia contra Marcos Pérez Jiménez y o condena a 4 años 1 mes y 15 días de prisión.